Durante décadas Marceau ha sabido convertir su silencio en arte, obteniendo risas y lágrimas a públicos de todo el mundo. Sus ‘sketch’ cómicos y trágicos alcanzan un nivel universal en el que cada uno interpreta su lenguaje dependiendo de su propio contexto.
“El mimo, como la música no conoce de fronteras ni de nacionalidades” dijo una vez. “Si la risa y el llanto son características de la humanidad, todas las culturas están incluidas en esta disciplina”. Sobre el escenario encandilaba silencios y fuera de él, sin maquillaje su elocuente descripción del mundo complementaban su mutismo magistral del arte del mimo.
El mimo, tal como Marceau apuntó, podía expresar la esencia de las más secretas aspiraciones del alma a través de los gestos. “Si el mimo es viento, uno se convierte en tempestad, Si es un pez te introduce dentro del mar”. Marcel se inspiró en los genios del humor sin palabras: Desde Chaplin y Keaton a los payasos de la Comedia dell’Arte pasando por la ópera China y el teatro Noh japonés.
El francés nació en la ciudad de Alsacia, Estrasburgo el 22 de marzo de 1923. Luchó en la II Guerra Mundial con la Resistencia tras el asesinato de su padre por el ejército nazi. Al acabar la guerra Marceau ingresó en en el estudio de actores de Charles Dullin.
FUENTE: InformativosTele5
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