Afortunadamente ambos accidentes ocurrieron en cocheras, por tanto los trenes iban sin viajeros.
La noticia ha transcendido ahora pues pese al mutismo de la Comunidad de Madrid y al silencio cómplice de muchos medios de comunicación, los sindicatos de trabajadores del metro (“Solidaridad Obrera”) la han dado a conocer.
El primer descarrilamiento se produce el jueves, día 20 de septiembre, cuando un tren de la serie “7000” descarrilla en el depósito de Cuatro Vientos. Este accidente se produce porque el tren no frena en el tope de la vía, saliéndose y subiendo un terraplen de más de 4 metros de altura. Gracias a este desnivel se evitó que el tren invadiese la M-40, repleta de coches a esas horas de la tarde. Este tren lo conducía el trabajador de una subcontrata que resultó herido leve.
En la mañana del viernes pasado, esta vez en el depósito de Aluche, otro tren, esta vez de al serie “2000”, descarrila en la vía 9. También conducía el trabajador de otra subcontrata.
Tras estos accidentes, silenciados por muchos medios de comunicación, los sindicatos de trabajadores del metro quieren llamar la atención sobre el peligro al que se somete continuamente a trabajadores y usuarios del metro que, desconocedores de estas circunstancias, toman este medio de transporte público suponiendo que se les garantizan todas las medidas de seguridad y no es así.
El sindicato “Solidaridad Obrera” tiene interpuesta una Querella Criminal, desde septiembre de 2006, que lleva el Juzgado de Instrucción número 26 de Madrid, contra los directivos del Metro responsables de dar órdenes saltándose medidas de seguridad.
FUENTE: EspejoDeMadrid
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