Gracias a este altercado, los pasajeros del vuelo Madrid- México de Iberia tuvimos que desembarcar. No contentos con esto, la compañía aérea nos ofreció un desayuno espantoso del que es mejor no hablar y acabamos embarcando el martes, 13 de noviembre, a las 11 horas y doce horas después aterrizamos en México.
Las fotos fueron tomadas dentro del avión y el cantante ni se daba cuenta, tal vez porque estaba demasiado ocupado discutiendo con la azafata o por el estado en que se encontraba. Sin embargo, para evitar que la tripulación me llamara la atención, las hice sin flash.
En resumen, una experiencia inolvidable, desgraciadamente, en el peor de los sentidos.
FUENTE: ElPais
Gracias, Gustav
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