Según ha informado un portavoz de la cadena, el programa volverá en los primeros días de enero con una nueva ubicación en la parrilla, aún por determinar. Este lunes, el Defensor del Menor de la Comunidad de Madrid, Arturo Canalda, ya se mostró "contrario a la utilización de los menores en cualquier 'reality show'", tal y como recoge Servimedia.
En Cataluña ya han surgido las primeras quejas entre las autoridades. La Conselleria de Acció Social i Ciutadania de la Generalitat ha pedido a Telecinco que suspenda la emisión del programa porque "pone en peligro el derecho a la intimidad, el honor y la propia imagen de los menores".
La Secretaria de Infancia i Adolescencia del departamento, Imma Pérez, ha manifestado en un comunicado su "pleno desacuerdo" en la emisión de este 'reality show'. Pérez considera que este tipo de programas "no aportan nada positivo a los menores que participan" y lamenta que algunos padres consideren "que sus hijos son de su propiedad, cuando sólo los acompañan en la vida".
Pérez recuerda, además, que "no está bien hacer un circo televisivo con niños y niñas que son del todo ajenos al lucro y al negocio que comporta la producción de estos programas de televisión".
"No se trata de ejercer una labor de censura, pero cuando hablamos de menores hay que tener mucho cuidado. Los niños no tienen que hacer un espectáculo, salen en los medios y no pasa nada, pero hay que respetar unas reglas", ha puntualizado Canalda.
'Exhibición de intimidades'
Más dura ha sido la Organización de defensa de la infancia. Su portavoz, José Luis Calvo, ha dicho que este "sucedáneo de 'Gran Hermano'" constituye "una clara exhibición de las intimidades de unos niños, que aparecen con nombres y apellidos, y a los que se coloca en circunstancias anómalas como la de manchar con pintura las paredes de una habitación para provocar la risa del respetable".
Para la asociación en defensa del niño Prodeni, "no hay ya voto de confianza que valga para este espacio", una vez visto el programa de debut: "La Fiscalía tiene que tomar cartas en el asunto, y el Gobierno debe actuar para que no se siga con esta explotación de los menores en el negocio televisivo".
FUENTE: ElMundo
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