Como si se tratara de un antecesor gigante de El coche fantástico (Knight Rider) la NBC planeó realizar una serie con un protagonista muy especial: ¡Un tren nuclear! Ciertamente, a finales de los setenta el idilio del público con la tecnología nuclear ya era cosa del pasado, más propio de los años cincuenta cuando se pensó en aplicar reactores nucleares a prácticamente cualquier cosa, pero no por ello deja de ser una propuesta con cierto atractivo en lo que al espectáculo se refiere. El siguiente vídeo, con la cabecera de la serie, puede darnos una idea de lo que habían previsto.
Supertrain apenas contó con nueve episodios, incluyendo un piloto de dos horas. La NBC pensó que sería todo un éxito y, entre febrero y mayo de 1979 emitió esos episodios, en los que no repararon en gastos, convirtiendo al engendro en una de las series más caras de todos los tiempos. El ficticio tren nuclear, repleto de lujos e instalaciones propias de un hotel de cinco estrellas o incluso de un crucero era capaz de recorrer Estados Unidos de costa a costa, entre Nueva York y Los Ángeles en poco más de 36 horas. Por lo demás, las tramas de los capítulos se centrarían en lo que nos podemos imaginar: conflictos entre los pasajeros, historias de amor, problemas con la tecnología y, sobre todo, con la propulsión nuclear, vamos, como Vacaciones en el mar pero sobre raíles, con pánico nuclear como condimento adicional. La serie no llegó a ninguna parte y fue cancelada prácticamente al poco de nacer, dejando como recuerdo un conjunto de maquetas de impresionante tamaño y un considerable agujero en el presupuesto de la NBC.
FUENTE: Tecnología Obsoleta
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