Casi sin poder moverse apenas fue capaz de teclear un breve mensaje de texto con el móvil solicitando ayuda a su marido (“help can’t move pls call“) quien avisó a su vez al personal sanitario de urgencias del cercano hospital Sandringham. Una vez allí los médicos que la atendieron le pidieron que realizara algunos ejercicios de movilidad cervical. El brazo izquierdo de Monique comenzó perder sensibilidad así que la inmovilizaron y la enviaron de inmediato a la unidad de traumatología medular del hospital The Alfred al descubrir que las dos primeras vértebras cervicales estaban dislocadas.
Afortunadamente no ha habido mayores consecuencias y Monique ha podido recibir un tratamiento adecuado para recuperarse. Como dice el neurocirujano que la ha atendido, doctor Patrick Chan, “ha sido desafortunada y el estornudo ha sido realmente violento”, pero no se ha ocasionado ningún daño a la médula y se recuperará sin problemas.
FUENTE: Minuto Digital
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