Uno de los problemas de las películas 3D sigue siendo el mismo desde hace décadas: necesitas de unas gafas especiales para conseguir apreciar el efecto tridimensional.
Esto está llevando a que se cree un negocio paralelo al del cine y los televisores 3D basado en gafas polarizadas. De hecho puedes encontrar actualmente actualmente algunas de diseño, gafas 3D que parecen gafas de sol para que nadie se de cuenta de qué es lo que estás llevando puesto realmente.
Una solución alternativa es la que proponen Lucy Jung y Daejin Ahn, un par de diseñadores que han pensado que sería buena idea que unas gafas normales y corrientes se convirtieran en gafas 3D a voluntad.
El truco se basa en unas pegatinas auto-adhesivas que pueden adherirse al cristal de las gafas cuando vayas a ver una película, ya estés en tu casa o en la sala del cine. Cuando termines de ver la película retiras las pegatinas y listo.
Otra ventaja es que si tu vista es perfecta y no necesitas de gafas graduadas normalmente, puedes utilizar unas gafas con cristales no-graduados con el diseño que más te guste y añadirle las pegatinas.
FUENTE: Tec.nologia
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