El hallazgo tuvo lugar hace cinco años en Denver (Colorado, EEUU), cuando Steve acudió a un hospital para tratarse una piedra en el riñón. Al aplicarle los ultrasonidos, el galeno descubrió que aquel hombre era en realidad, o mejor dicho, además, una mujer. Porque Steve/Stevie tenía ambos órganos sexuales, masculinos y femeninos, lo que explica su reiterada paternidad.
Al serle revelada su doble condición, empezó a entender los “sentimientos femeninos” que tenía durante su infancia, según recuerda en una entrevista en ABC: "Fue liberador, porque validaba lo que sentía en mi interior", explica.
Entonces llegó la revolución: se cambió de nombre, se dejó crecer el pelo, se afeitó la perilla y se vistió con ropas de mujer. El resultado, como puede verse en el vídeo es un señor con peluca, disfrazado de señora. Lo más bonito del asunto es que la madre de sus hijos, Debbie, ha aceptado su nueva condición y siguen compartiendo su vida, como una pareja de señoras bien avenidas: "No he perdido un marido sino que he ganado una amiga", explica orgullosa su pareja.
FUENTE: Republica Insólita
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