Aviso, traducción libre por mí y por Google Translator. Puede que acierte, puede que no.. :D
Imagine cómo se sintió Danielle Smith, esposa y madre de dos niños, de Missouri, que ha encontrado la foto de su familia, publicado en Facebook, ¡en un poster gigante (10 metros por 5) de una publicidade una tienda en Praga!
¿Y el marido, que actualiza el estado sentimental, de "comprometido" a "casado", directamente desde el altar, ante la mirada atónita de los sacerdotes?
Estos son sólo dos de las 10 historias increíbles que puedes encontrar en el sitio que Odde protagonizada por Facebook, la red social famoso con 350 millones de usuarios.
El primer lugar es la de la bella Danielle Smith, esposa y madre de dos niñas sonrientes y rubias. La señora. Missouri, a principios de este año, había publicado una fotografía de la familia tan perfecta que parece falsa: marido y mujer con sus cabezas inclinadas en forma de corazón, chicas rubias y sonrientes, el icono del matrimonio idílico perfecto. ¿Cómo culpar a los publicistas, que después de ver la foto, la utilizaron para anunciar una tienda en Praga? La imagen de la señora Smith con su marido y los niños acamparon durante semanas en la capital checa, impreso en un cartel de diez metros por cinco, y Danielle nunca lo habría descubierto si no fuera por un amigo de la familia, que había ido de vacaciones a Praga.
La segunda historia es mucho menos increíble, pero puede servir para advertir a los usuarios más imprudentes. Nathalie Blanchard, que trabaja en IBM en Bromont, Quebec, perdió su prestación por enfermedad por culpa de Facebook, y todo por una foto que muestra a la implicada en la playa y en bañador. No habría ningún problema por publicar las fotos de sus vacaciones, excepto porque la señora había sido diagnosticada con depresión y en la foto muestra, de acuerdo con el departamento legal de la empresa, que Blanchard estaba muy lejos de estar enferma.
En tercer lugar se encuentra el marido ideal, lo que todas las mujeres desean tener, si eres una friki como él. Su nombre es Dana Hanna y actualizó su Facebook justo en el momento del "sí, quiero". El hombre es desarrollador de software y un amante de esta red social. Con el consentimiento del sacerdote y de su esposa, Dana actualizó su situación sentimental, directamente, dejando incluso un Tweet en Twitter. Una demostración sin precedentes de amor o de frikismo, según como se mire.
Pero Facebook no siempre sirve para sellar la unión, si no más a veces, para rupturas. De eso sabe algo la pobre Emma Brady, inglesa de treinta y cinco años de edad, que después de seis años de matrimonio, se enteró de que su marido Neil tenía la intención de divorciarse de ella al leer el estado sentimental de éste.
Quinto lugar en el ranking lo ocupa una historia algo más grave: Rodney Bradford, un chaval de 19 años, que ha logrado evitar una condena por robo gracias en parte a la actualización de su estado en Facebook. Una frase bastante tonta, "¿Dónde están mis tortitas?" que su abogado ha utilizado como coartada, demuestra que en el momento del robo, el niño estaba sentado delante del ordenador, preguntandose sobre la ubicación de su comida favorita.
Aún más útil ha sido la red social, sobre todo para Alex Anfuso, de veintidós años y de Egipto, que publicó la frase "en busca de mi madre" y que finalmente la encontró y pudo hacer una reunión familiar. Menos inteligente era el objetivo de José Romero, un adolescente ecuatoriano, que hizo una broma hace unos meses y abrió un grupo titulado "Si puedo llegar al límite máximo de un millón de amigos, me tatuo los 151 Pokemon en mi espalda". Aparte de la mala elección del tema, que sería un tatuaje horrible, el niño tal vez había subestimado a la gente y a la llamada que hizo en Facebook; consiguió que se unieran a las pocas horas el millón de personas, que entonces exigieron el tatuaje y ver las fotos de su espalda decorado con Pikachu y sus amigos. La promesa, por supuesto, no se cumplió y José suprimió el grupo de la web.
Hablando de promesas, pero esta vez una buena. La increíble historia, y octava de la lista, del amor entre Kelly Hildebrandt y Kelly Hildebrandt, un hombre y una mujer con el mismo nombre, que se conocieron por el Facebook ya que se llamaban igual. Después de algunos mensajes privados, se conocieron y se casaron. Menos románticas son las historias de hombres que han conocido a sus amantes por la red social. Descubiertos, siempre en Facebook, algunas suegras llamaron a la policía y todo...
Por último, la increíble historia del matrimonio de Valeria y Antonio, que fué destruido unos días después de la boda porque la novia descubre en Facebook que su amado le era infiel. En represalia, cubrió las paredes de Roma con folletos donde salían las fotos de los infieles. O eso parecía. Porque se descubrió que toda la operación era una campaña de marketing "viral".
FUENTE: Repubblica
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