Paul Moran ideó un plan para hacerse rico rápidamente convirtiendo sus propias heces en oro, según explican las autoridades de Irlanda del Norte. Pero al igual que el propio rey Midas, Moran podría haber tirado su vida por el desagüe en su búsqueda de sueños dorados.

 Moran cruzó la línea con sus experimentos de alquimia, provocando un incendio en su apartamento que se echó a arder después de que colocara sus heces en un calentador eléctrico, de acuerdo con el Belfast Telegraph.

 El residente de 30 años, de la ciudad de Enniskillen, causó daños en su casa por valor de casi 4.800 dólares. Moran fue acusado de incendio premeditado y de poner en peligro las vidas de otros.

 Ha sido condenado a tres meses de cárcel seguidos de un año de libertad supervisada. "Es extraño que estuviera tratando de hacer oro a partir de las heces humanas y los productos de desecho", dijo el juez, de acuerdo con el Belfast Telegraph. 
"Fue un experimento interesante para cumplir el sueño de los alquimistas, pero no iba a tener éxito".
El abogado de Moran, declaró que su cliente es un hombre inteligente que ha sufrido de un problema de drogas.

FUENTE: Diario De Porteras